El 23 de junio de 1975, hace hoy cuarenta años, la locomotora 141f-2348 entra en la estación de clasificación de Vicálvaro (Madrid) con un tren de mercancías. Allí esperaba un personaje ajeno a las habituales tareas ferroviarias que allí se desarrollaban, día a día.
Aquel personaje era el príncipe Juan Carlos de Borbón, quien apenas unos meses después accedería al trono con el nombre de Juan Carlos I. Poco después, el futuro monarca accede a la cabina de la vieja “Mikado” para apagarla definitivamente. Era el final de la tracción vapor en los servicios comerciales en España. Acababa así una era del ferrocarril.
El apagado de esta locomotora fue meramente simbólico. Es cierto que RENFE cerró definitivamente la era del vapor con este acto, pero otros ferrocarriles menores, como el Ponferrada - Villablino, en la provincia de León, mantuvieron este tipo de locomotoras hasta 1989.
Aquel personaje era el príncipe Juan Carlos de Borbón, quien apenas unos meses después accedería al trono con el nombre de Juan Carlos I. Poco después, el futuro monarca accede a la cabina de la vieja “Mikado” para apagarla definitivamente. Era el final de la tracción vapor en los servicios comerciales en España. Acababa así una era del ferrocarril.
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| Sobre conmemorativo de las I Jornadas Escolares Ferroviarias de Reus, con la imagen de una “Mikado”, la 141-2413. |
Aquella histórica “Mikado” se conserva en la actualidad, preservada en el Museo Nacional del Ferrocarril, en Vilanova i la Geltrú (Barcelona).
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| La 141f-2348 en el Museo del Ferrocarril de Vilanova i la Geltrú, donde se encuentra preservada. (Foto: Mario Sámchez, 2011) |
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